Quiero empezar el año a lo grande y para ello vuelvo mi mirada a dos grandes figuras del cine: Orson Welles y Akira Kurosawa; sin duda son dos de los directores de cine más influyentes del siglo XX. Cada uno de ellos dejó una marca indeleble en la Historia del Cine a través de sus historias, estilos visuales y narrativos y sus propias técnicas cinematográficas.

Os dejo con una comparativa de los estilos, influencias y películas más representativas de estos dos cineastas claves para entender el devenir del arte cinematográfico moderno.

1. Estilo Visual de Orson Welles y Akira Kurosawa

1.1. La Estética Visual de Welles

Si en algo destaca Orson Welles es por su uso innovador de la profundidad de campo, como se aprecia en Ciudadano Kane (1941), donde cada plano está compuesto para mostrar múltiples niveles de acción en el mismo encuadre. Welles también usaba ángulos de cámara bajos para crear una sensación de poder o vulnerabilidad.

Experimentó con el uso de la luz y la sombra influenciado directamente por el Expresionismo Alemán. En Sed de Mal (1958), por ejemplo, la iluminación crea un ambiente opresivo, que contribuye a resaltar la corrupción y el caos.

Su montaje dinámico y secuencias de planos largos, como la famosa escena de apertura de la citada Sed de Mal, contribuyen a un estilo visual distintivo que enfatiza la fluidez narrativa.

1.2. Kurosawa y su Estilo Cinematográfico

Akira Kurosawa es reconocido por su uso del movimiento dentro del encuadre y la composición de planos de carácter pictórico. En películas como Rashomon (1950) y Ran (1985), el viento y otros elementos naturales son utilizados para dar vida a las escenas.

La utilización del montaje de acción rápida y el uso de la cámara lenta en momentos clave, especialmente en escenas de batalla como por ejemplo en Los 7 Samurais (1954), le permitió crear una estética que se transmitió al cine de acción posterior.

Kurosawa también buscaba encuadres simétricos y composiciones con múltiples personajes, lo que ayudaba a transmitir el drama colectivo, como en El Infierno del Odio (1963).

2. Influencias y Contextos Históricos de Orson Welles y Akira Kurosawa

2.1. Los Orígenes Teatrales de Orson Welles

El teatro y en menor medida la radio fueron las escuelas de Orson Welles. El cineasta americano era un devoto del teatro y dirigió y actuó en numerosas producciones teatrales antes de volcarse en el cine. Sus primeros pasos en el medio de la radio son bien conocidos gracias a su famosa adaptación de La Guerra de los Mundos. Sus experiencias previas en las técnicas de la dramaturgia determinaron su estilo narrativo. Consiguió trasladar sus conocimientos teatrales a la puesta en escena de sus películas y al enfoque dramático que le daba a las mismas.

La influencia que Orson Welles recibió tanto del Expresionismo Alemán como del Cine Negro americano se manifiesta en su uso de la iluminación y del diseño de producción. Ciudadano Kane revolucionó las técnicas cinematográficas y sirvió como un punto de inflexión del cine moderno.

Welles operaba en el contexto de Hollywood, donde su carrera se vio marcada por tensiones con los estudios, lo que a menudo llevó a la reestructuración de sus películas sin su consentimiento.

2.2. El Amor por los Clásicos de Akira Kurosawa

Kurosawa amaba el cine occidental y se inspiró directamente en directores del cine Clásico Americano como John Ford, a quien admiraba por su habilidad para narrar historias épicas y por su uso del paisaje. Esto es especialmente visible en películas como Ran y Los 7 Samurais, que tienen un gran movimiento de personajes en amplios espacios abiertos.

La literatura también fue una gran influencia del director japonés, lo que le llevó a adaptar obras de William Shakespeare (Trono de Sangre, 1957 o Ran, 1985) o Fiódor Dostoyevski (El idiota 1951).

Kurosawa trabajó en el contexto de la industria cinematográfica japonesa de posguerra, donde sus películas abordaban tanto la tradición local como la modernidad. Sus historias, aunque muy japonesas, tuvieron una amplia repercusión internacional.

3. Temas principales que abordaron Welles y Kurosawa

3.1. Los temas preferidos Orson Welles

Welles explora en su cine temas como la ambición, la corrupción, el poder y la decadencia. Ciudadano Kane es un estudio del poder y la soledad, mientras que Sed de Mal aborda la corrupción y la moralidad en una sociedad disfuncional.

A menudo presenta personajes trágicos que son víctimas de sus propias ambiciones o circunstancias, reflejando la complejidad y las contradicciones humanas.

La idea del «mito» personal y la búsqueda de la verdad son temas recurrentes, donde sus personajes luchan por definir sus identidades.

3.2. Akira Kurosawa y la Naturaleza Humana

Sus películas tienden a explorar el honor, la justicia, la moralidad y la naturaleza humana. En Rashomon, por ejemplo, aborda la subjetividad de la verdad a través de diferentes perspectivas sobre un mismo suceso.

El sacrificio personal por el bien común es un tema recurrente de Kurosawa y lo llevó hasta sus últimas consecuencias en películas como Los Siete Samurais, donde los personajes luchan por proteger una aldea a pesar de sus pocas probabilidades de éxito.

La influencia de la cultura japonesa en las películas de Kurosawa es evidente, pero su trascendencia se debe a su tratamiento de la fragilidad humana y del impacto de la guerra en las personas, tan comunes en cualquier sociedad, ya sea oriental u occidental. Ejemplos de esto mismo los encontramos en obras como Ikiru (1952) o Ran (1985)

4. Películas Más Representativas de Orson Welles y Akira Kurosawa

4.1. Filmografía destacada de Orson Welles

Ciudadano Kane (1941)

Considerada una de las mejores películas de la historia, destaca por su narrativa no lineal, profundidad de campo y análisis de la vida de un magnate.

El Cuarto Mandamiento (1942)

Aunque fue editada sin la supervisión de Welles, es un drama familiar que muestra su habilidad para explorar la decadencia de la aristocracia estadounidense.

La Dama de Shanghai (1947)

Clásica Historia de Cine Negro donde nada es lo que parece. El papel de mujer fatal recae en este caso en Rita Hayworth

Sed de Mal (1958)

Un ejemplo de cine negro con una compleja estructura narrativa y una atmósfera visual oscura.

4.2. Películas más destacadas de Akira Kurosawa

Rashomon (1950)

Revolucionó la narrativa cinematográfica con su estructura de múltiples perspectivas, influyendo en el cine moderno.

Los Siete Samurais (1954)

Un clásico del cine épico y de acción, que estableció las bases para futuras películas de samuráis, vengadores y pistoleros de todo tipo.

Ran (1985)

Una adaptación de El rey Lear de Shakespeare, con una producción espectacular y escenas de batalla que han sido ampliamente imitadas.

5. El Acercamiento a Shakespeare de Orson Welles y Akira Kurosawa

Hablando de Shakespeare, Akira Kurosawa y Orson Welles son dos de los directores que más profundamente exploraron el universo shakespeariano; dos autores que, aunque vivieron separados por océanos culturales y estilísticos, encontraron en el bardo inglés una de sus fuentes de inspiración.

5.1. La Conexión Shakespeariana de Akira Kurosawa

5.1.1. El Contexto Cultural: Japón y Shakespeare

Akira Kurosawa encontró en Shakespeare un eco de las tragedias que trataron los valores y dilemas éticos del Japón feudal. En lugar de realizar adaptaciones literales, Kurosawa trasladó las historias de Shakespeare a contextos locales, fusionando las tramas y personajes del dramaturgo con la estética del «jidaigeki», el cine de época japonés. Este juego ayudó no sólo a su narrativa visual, sino también a la universalización de los temas que Shakespeare abordó en su teatro, que quedaron para siempre conectados con culturas y tradiciones lejanas.

5.1.2. Trono de sangre (1957): Macbeth en el Japón feudal

Trono de sangre (Kumonosu-jō) es la adaptación de la obra de Shakespeare Macbeth. La película traslada la tragedia escocesa a un castillo envuelto en niebla en Japón, donde Washizu y su esposa, Asaji, se convierten en los paralelos de Macbeth y Lady Macbeth. Kurosawa elimina el lenguaje shakespeariano y se centra en una narrativa visual profundamente influenciada por el teatro Noh.

La figura espectral de Asaji, interpretada con una quietud que recuerda a los demonios del Noh, personifica la ambición fría y calculadora. Por otro lado, la puesta en escena se apoya en imágenes minimalistas y paisajes desolados que refuerzan la atmósfera de fatalismo. La escena final, con Washizu enfrentando una lluvia de flechas, se ha convertido en un símbolo de la caída inevitable de aquellos que sucumben a la ambición desmedida.

5.1.3. Ran (1985): El rey Lear como tragedia épica

En Ran, Akira Kurosawa adapta El rey Lear en una narrativa épica que mezcla la decadencia de un clan samurái con el caos de la guerra civil. Aquí, Hidetora Ichimonji reemplaza al rey Lear como el patriarca que divide su reino entre sus tres hijos, solo para ver cómo su legado se desmorona.

La película se aleja de los diálogos shakesperianos, priorizando una narrativa cinematográfica que combina una coreografía meticulosa con un uso magistral del color. Los trajes vibrantes de los tres hijos simbolizan sus roles y destinos, mientras que la figura de Hidetora, envejecido y perdido en un paisaje devastado, encarna la desolación de la tragedia. Kurosawa muestra a un Shakespeare que reflexiona no solo sobre la fragilidad humana, sino también sobre la naturaleza de la lealtad y la traición en contextos de poder.

5.2. Orson Welles y su Shakespeare Cinematográfico

5.2.1. El Estilo de Welles: Shakespeare como Tragedia Visual

Orson Welles abordó a Shakespeare desde una perspectiva teatral, manteniendo el lenguaje original del dramaturgo pero reinventándolo para el medio cinematográfico. Su profunda comprensión de las estructuras dramáticas de Shakespeare le permitió reinterpretar las obras de manera audaz, adaptando los textos al tiempo que preservaba su esencia poética.

5.2.2. Macbeth (1948): Un Shakespeare Oscuro y Experimental

La versión de Macbeth de Welles se caracteriza por una atmósfera gótica y opresiva, lograda mediante escenarios minimalistas, iluminación expresionista y un presupuesto limitado del que Welles supo hacer virtud. Rodada en apenas 23 días, la película traslada a Shakespeare a un terreno más primitivo, con personajes envueltos en pieles y una bruma constante que intensifica la sensación de fatalismo.

Welles utiliza el lenguaje original de Shakespeare, aunque con cortes y reorganizaciones que favorecen la fluidez narrativa. Su interpretación de Macbeth destaca por su vulnerabilidad, retratando a un hombre atrapado entre la ambición y el destino.

5.2.3. Otelo (1952): Fragmentos de una Tragedia Monumental

En Otelo, Welles enfrentó desafíos financieros que influyeron en la producción, pero que no impidieron la creación de una obra singular. Filmada a lo largo de tres años en localizaciones de Marruecos, Italia y Francia, la película destaca tanto por su ingenio visual, como por el uso de sombras y ángulos oblicuos que logran transmitir tensión y drama.

La narrativa es fragmentada, reflejo de las dificultades de producción, pero esto añade una cualidad casi onírica a la historia de celos y traición. La interpretación de Welles como Otelo es imponente, mientras que su montaje y estilo visual refuerzan los temas de paranoia y aislamiento.

5.2.4. Campanadas a Medianoche (1965): El Genio de Welles y Falstaff

Campanadas a Medianoche es considerada la obra maestra shakespeariana de Welles. Construida a partir de varios textos de Shakespeare, como Enrique IV y Las Alegres Comadres de Windsor, la película gira en torno a Falstaff, un personaje secundario que se convierte en el alma de la narración.

La relación entre Falstaff y el príncipe Hal es el eje emocional de la película, explorando temas como la amistad, el poder y la traición. Orson Welles combina un tono melancólico con un estilo visual barroco, creando una obra profundamente personal que resalta su propio desencanto con las estructuras de poder.

5.3. Similitudes y Diferencias de Welles y Kurosawa en su Aproximación a Shakespeare

Ambos directores, cada uno a su manera, transformaron las palabras de Shakespeare en imágenes inolvidables, dejando un legado que continúa inspirando a generaciones de cineastas y deleitando a los aficionados al cine entre los que me encuentro. Sin embargo, existen similitudes y diferencias en su acercamiento al genio de Stratford.

5.3.1. Puntos de Encuentro

1. Reinterpretación del Texto: Tanto Kurosawa como Welles reinterpretan a Shakespeare desde sus propios contextos culturales. Kurosawa traduciendo las obras al Japón feudal y Welles adaptando el lenguaje para potenciar la narrativa cinematográfica.
2. Visión Trágica del Poder: Ambos directores encuentran en Shakespeare un terreno fértil para explorar algunos de los temas de las tragedias Shakesperianas como son la ambición, la traición o la decadencia. En Trono de Sangre y Macbeth, la ambición se convierte en una fuerza destructiva, mientras que Ran y Campanadas a Medianoche examinan la fragilidad de las relaciones humanas en el contexto del poder.

5.3.2. Divergencias Estilísticas

1. Narrativa Visual vs. Lenguaje: Mientras Kurosawa utiliza el lenguaje cinematográfico como sustituto del texto shakespeariano, Welles conserva y resalta el lenguaje original, adaptándolo para el cine.
2. Estética Cultural: Kurosawa se inspira en el teatro Noh y Kabuki, mientras que Welles bebe del Expresionismo Alemán y su experiencia teatral para crear atmósferas densas y estilizadas.
3. Enfoque en los Personajes: Kurosawa suele privilegiar las narrativas corales y épicas, mientras que Welles profundiza en la psicología de los personajes dotándolos de humanidad.

6. Impacto y Legado de Welles y Kurosawa en la Historia del Cine

6.1. Influencia de Orson Welles en el Cine Posterior

Su innovación técnica y narrativa estableció nuevas posibilidades para el cine moderno. Citizen Kane sigue siendo un referente de estudio para los historiadores del cine. Su influencia habría sido mayor si hubiera podido desarrollar todos sus proyectos tal como los ideó. Sin embargo, su carrera se vio marcada por sus peleas con los estudios, lo que dejó algunas de sus películas incompletas o alteradas.

Cineastas como Elia Kazan, Joseph Losey, Otto Preminger, Roman Polanski o Robert Aldrich, entre otros, han bebido de la fuente inagotable de Welles.

6.2. Akira Kurosawa y su impacto en cineastas de todo el mundo

Influenció tanto al cine japonés como al cine occidental y su legado puede verse en la obra de directores como George Lucas, Francis Ford Coppola y Sergio Leone. Entre otras aportaciones, Kurosawa fue un puente entre las tradiciones cinematográficas de Oriente y Occidente, marcando un antes y un después.

Ambos directores compartían una visión épica y una profunda preocupación por la naturaleza humana, aunque sus aproximaciones estéticas y temáticas fueran diferentes.