Revisitando al guionista americano Dalton Trumbo
Dalton Trumbo fue un guionista y novelista norteamericano que empezó su carrera en el Hollywood de los años treinta. Figura imprescindible del cine norteamericano, fue uno de los llamados “Diez de Hollywood”
Empiezo aquí mi revisión de los principales guionistas y escritores americanos que trabajaron en la industria del cine en la época dorada de Hollywood. Se unen a Dalton Trumbo nombres fundamentales como Ben Hecht, James M. Cain, Horace McCoy, William Riley Burnett o Abraham Polonsky
Los inicios de Dalton Trumbo
Dalton Trumbo nació en 1905 en Montrose, Colorado aunque pasó toda su infancia y juventud en Grand Junction. A la muerte de su padre en 1925, Trumbo se mudó a Los Ángeles para ayudar a su madre y hermanas pequeñas. Allí comenzó su carrera profesional como periodista publicando sus primeros artículos y ensayos en varias revistas, tales como Vanity Fair, The Saturday Evening Post o The Hollywood Spectator, de la que llegó a ser Director.
Desde joven, Dalton Trumbo quiso convertirse en novelista y debutó como tal con Eclipse en 1935, una sátira sobre un hombre de negocios hecho a sí mismo. Como tantos otros profesionales de la pluma, pronto se vio metido de lleno en la industria cinematográfica.
El guionista Dalton Trumbo
Su carrera como guionista fue lo que puede llamarse rutinaria pues escribió veintiún guiones en los siguientes seis años, muchos de ellos “remakes” de películas de serie B y bajo presupuesto para Warner, Columbia y RKO. Sus obras más sobresalientes de esa época fueron Five came Back (1939) y la adaptación de la novela de Christopher Morley, Kitty Foyle (Espejismo de Amor,1940), que fue seleccionada para los premios Oscar.
Al igual que otros escritores estadounidenses, compaginó su trabajo de escritor con el de guionista en la naciente industria cinematográfica. Véase entrada Escritor y Guionista ¿Amigos o Enemigos? y también Escritores en Hollywood
Y llegó el libro de Johnny cogió su fusil
Con el estallido de la Segunda Guerra Mundial, los indicios de seriedad y espiritualidad que sus primeros guiones apuntaban se hicieron más evidentes. Fue entonces cuando comenzó a escribir sus obras más personales.
La idea de su anti-belicista Johny Got His Gun (Johny cogió su fusil) partió de un artículo que leyó sobre un oficial británico que quedó horriblemente desfigurado durante la Primera Guerra Mundial.
El libro apareció en 1939 y ganó el “National Book Award”. Andando el tiempo, él mismo llevó al cine esta historia en un largo proceso en el que no sería indiferente Luis Buñuel. La novela permaneció durante mucho tiempo como un clásico prohibido hasta su «rehabilitación» en 1959, en plena generación de Bob Dylan y su canción protesta.
Joe, su protagonista, es un soldado cuyo cuerpo queda destrozado en combate durante la Primera Guerra Mundial. En un principio, no es muy consciente de su situación pero cuando finalmente conoce su estado, busca desesperadamente comunicarse con el exterior. Dalton Trumbo sigue los pensamientos, sentimientos y recuerdos de su personaje mientras él permanece sólo en su pesadilla:
“No tenía piernas, ni brazos, ni ojos ni orejas ni nariz ni boca ni lengua. Qué demonios es este sueño. Debe ser un sueño. Dios, desde luego que es un sueño. Más vale que te despiertes o te volverás loco. Nadie podría vivir así”
Dalton Trumbo tras la Segunda Guerra Mundial
Durante la Segunda Guerra Mundial, Dalton Trumbo fue corresponsal de guerra con las Fuerzas Aéreas de los EEUU. De sus vivencias salió Thirty seconds over Tokyo (Treinta Segundos sobre Tokio,1944), que trataba del primer ataque americano sobre Japón. Trumbo quiso darle un aire de documental evitando cualquier tinte racista.
Dalton Trumbo, fuera de la industria cinematográfica
En los años siguientes a la guerra, el claustrofóbico ambiente político que se vivió en los EEUU afectó sobremanera a la carrera de Dalton Trumbo. En 1947, su negativa a testificar ante el Comité de Actividades Anti-Americanas sobre la infiltración comunista en el mundo del cine, causó su despido de la Metro-Goldwyn-Mayer y su encarcelamiento durante un año en 1950.
Formar parte de las listas negras del Macartismo suponía no volver a trabajar en los EEUU, así que Dalton Trumbo se trasladó a vivir a Méjico, donde se reunió una pequeña colonia de represaliados.
Él, que había sido uno de los guionistas mejor pagados de Hollywood, tuvo que aceptar trabajos de principiante, firmar guiones bajo seudónimo o recurrir a otros profesionales para que los firmaran como suyos. Su guion para The Brave One (El Bravo, 1956), basada en su propia historia The Boy and the Bull, ganó un Oscar de la Academia bajo el seudónimo de Robert Rich.
La rehabilitación de Dalton Trumbo
El nombre de Dalton Trumbo apareció en los títulos de crédito de Spartacus (1960) y Exodus (1960) para desazón de la industria del cine. Para la primera fue contratado por Kirk Douglas, a quien siempre habían gustado sus historias. Spartacus estaba basada en la novela de Howard Fast, a quien se le presentó el guion como de Eddie Lewis, asiduo colaborador de Douglas.
A partir de ese momento vinieron para Trumbo otros trabajos como Hawai (1966), a partir del exitoso libro de James Michener, o The Fixer (1968) que fue dirigida por John Frankenheimer con Alan Bates y Dirk Bogarde sobre la novela de Bernard Malamud. Es la historia de un judío llamado Yakov Bok, quien, acusado injustamente de varios cargos, se convierte en la encarnación de la dignidad humana y de la fortaleza para luchar contra la injusticia.
John Frankenheimer, director de El Tren, entre otras grandes películas, dice en el libro The Cinema of John Frankenheimer, 1969 de Gerald Partley:
“Creo que el guion de Dalton Trumbo es una obra maestra. Si yo hubiera estropeado ese guion, merecería la muerte. Tal es la belleza de su trabajo”
A finales de los años 60, con una nueva generación en el control de Hollywood, Trumbo volvió a casa convertido en un héroe y tuvo la oportunidad de dirigir la adaptación de su antigua novela Johny Got His Gun (Johnny Cogió su Fusil, 1971). La película fue galardonada en el Festival de Cannes y tuvo gran impacto en su país por su simbología con la Guerra de Vietnam.
Trumbo murió el 10 de Septiembre de 1976 sin acabar su última novela Night of the Aurochs siendo Robert Kirsch quien la preparó para su publicación póstuma en 1979. El libro toma la forma de la autobiografía de un nazi.
Helen Manfull recopiló y editó sus cartas con el nombre de Additional Dialogue