Una de mis mayores sorpresas del Festival de Sitges 2023 fue el debut del director coreano Jason Yu. Su película Sleep (2023) se proyectó en «la semana de la crítica» del Festival de Cannes 2023 y se estrenó en Corea el pasado mes de septiembre. Aquí os traigo pues pues mi crítica de Sleep, de Jason Yu.

Sleep no es sólo una película de terror. Es una comedia negra, un drama familiar, un thriller y también una película de terror. Esto es algo que sucede habitualmente en el cine de género coreano. La mezcla de géneros parece una marca de la casa, y es que estos chicos son unos auténticos expertos.

Parásitos (2019) fue una masterclass por parte de su director, Bong Joon-ho, y sirve como precedente para futuras producciones coreanas con las mismas pretensiones narrativas. Al igual que la ganadora a Mejor Película en 2020, Sleep se propone no parar nunca de sorprender al espectador. Y lo consigue.

El filme parte de una premisa muy sencilla. Hyeon-soo (Lee Sun-Kyun) y Soo-jin (Jung Yu-mi) son una pareja recién casada que espera un hijo. Él es un actor sin demasiado éxito, afectado por el estrés, y ella una comprensiva y optimista ama de casa. Es un matrimonio idílico, decididos a afrontar toda clase de problemas y siempre salir adelante.

El problema llega de repente y sin explicación alguna: Hyeon-soo comienza a padecer alteraciones del sueño tales como sonambulismo. Lo que en un principio parece inofensivo, poco a poco va evolucionando en comportamientos grotescos y peligrosos para la pareja y para el bebé.

Jason Yu, tanto en su papel de guionista como de director, hace un gran trabajo en este aumento de tensión. Maneja los espacios (el piso como localización principal es una maravilla) y el fuera de campo con mucha sabiduría, pero aquí el punto más fuerte es el guion.

Es fácil bajar la guardia durante su primer capítulo (una decisión estructural que le aporta más bien poco a la historia) donde hay numerosos destellos humorísticos y un tono muy ligero. Pero planta ideas paranoides en la audiencia con mucha eficacia y sutileza.

Cuando llega el horror, éste aparece de formas muy distintas y golpea con muchísima contundencia. El humor se vuelve cada vez más negro y el drama coge mucha fuerza una vez nace el bebé. No te sientes a salvo en ningún momento.

La película rara vez se estanca en alguno de sus puntos o escenas. Interese más o menos, está narrada con un ritmo increíble y no para de sorprender.

Cuando te acostumbras a su metodología de generar tensión, rompe tus esquemas con un giro, un detalle o una elipsis. Cuando parece acercarse a una resolución, te sorprende con un clímax inesperado, divertido, tétrico y deliberadamente ambiguo. Aquí se puede discutir la eficacia del director para comunicar esta ambigüedad, pero para ello tendría que destripar toda la trama.

La película tendrá próxima fecha de estreno en España.